UN PACTO DE AMOR

                                                     UN PACTO DE AMOR

　

　

Asi dice el Senor: Paraos en los caminos, y mirad. Preguntad por las sendas antiguas, cual sea el buen camino, y andad por el, y hallareis descanso”. Pero dijisteis: “No andaremos“. Jeremias 6:16.

Desde antes de Cristo venir a este mundo, en el Monte Sinai, Dios cito al pueblo de Israel a traves de Moises. Estando a los pies del monte, al tercer dia cuando amanecio, vinieron truenos y relampagos, y una espesa nube sobre el monte. Y un penetrante sonido de trompeta estremecio a todo el pueblo que estaba en el campamento y todo el pueblo vio y oyo los truenos, los relampagos y el monte que humeaba y temblando de miedo, se mantuvieron lejos. Entonces el Senor dijo a Moises: sube a mi al monte, y espera alla, y te dare tablas de piedra con la Ley y los Mandamientos que escribi para instrucción de ellos. Ese dia Dios descendio en una nuve de humo y fuego y hablo con Moises e hizo un pacto. Moises permanecio en el Monte Sinai por 40 dias y 40 noches, sin comer ni beber y entonces Dios le entrego los diez mandamientos, escrito por el mismo dedo de Dios. Este es el pacto que Dios hizo con el pueblo de Israel, revelado en dos tablas, su ley y sus reglas y es el pacto espiritual y moral que debe guardar todo el que desee seguirle. Antes de Moises descender del monte, ya el pueblo estaba corrompido y apartado de la ley; pero Dios por su infinita misericordia perdono a Israel y renovo su pacto porque Moises rogo al Senor por su pueblo.

En el libro de Daniel, el narra cuando un Angel se le acerco y le dijo: “Hijo de Adan, entiende que la vision es para el tiempo del fin” y el Angel le mostro todo lo que ha de venir: Ore al Senor mi Dios, e hice esta confesion, diciendo: “Ahora, Senor, Dios grande, digno de ser reverenciado, que guardas el pacto de amor con los que te aman y obedecen tus Mandamientos, “hemos pecado, hemos cometido iniquidad, hemos obrado impiamente, hemos sido rebeldes, y nos hemos apartado de tus Mandamientos y tus juicios (Daniel 9:4-5). Asi dice el Senor: “ Cumplid mis preceptos, guardad mis normas, y ponedlo por obra, y habitareis seguros en la tierra” (Levitico 25:18). “Pero si no ois ni cumplis todos mis Mandamientos, si rechazais mis decretos y despreciais mis normas, si no cumplis todos mis Mandamientos e invalidais mi pacto, enviare sobre vosotros terror, extenuación y calentura que consuman vuestros ojos y atormenten vuestra vida. Sembrareis en vano vuestra semilla, porque vuestros enemigos la comeran“ (Levitico 26:14-16).

Este es un pacto de amor, para que vivamos en armonia, en santidad, en constante comunicación con el Creador y en absoluta obediencia. Debemos aprendernos estos preceptos y guardarlos en nuestro corazon, pero sobre todo practicarlos para poder crecer en el conocimiento y discernimiento de la Palabra de Dios. Este pacto se hizo con todos los que todavía estamos vivo. No solamente fue para el pueblo de Israel. La ley de Dios es perenne. Dios al enviarnos a Jesucristo nos dejo claro cuan grande es su Gloria y su Justicia. La obediencia trae consigo salud, felicidad, confianza y fortaleza. Cristo es nuestro refugio en momentos de afliccion, la fe es la columna de sosten y de apoyo del creyente, porque nunca olvida al Senor, vive con el a toda hora. Reconoce en cada acto de su vida el milagro y la gloria de Dios que siempre nos acompana cuando andamos en sus caminos. Sabemos que el sera nuestra justicia si cuidamos de cumplir sus Mandamientos. Hasta la segunda venida de Cristo el pacto estara vigente. “Reconoce pues, que el Senor es tu Dios, Dios fiel, que guarda el pacto y su constante amor por mil generaciones, a los que lo aman y guardan sus Mandamientos. Y que da su merecido en la misma carne al que lo aborrece, destruyendolo; y no sera lento para retribuir al que lo odia. En su cara le dara el pago” (Deut.7:9-10). Dice el Senor: “Guarda y obedece todas estas leyes que te mando. Asi al hacer lo que es recto a los ojos del Senor tu Dios, te ira bien a ti y a tus hijos para siempre“.

Cuando Jesucristo establecio la Santa Cena, reunido en la mesa con los  Apostoles antes de ser entregado para morir en la cruz, Cristo sabia que era su ultima cena de Pascua y dijo: “Porque os digo que no la comere mas, hasta que se cumpla en el reino de Dios”. Refiriendose al pan dijo: “Este es mi cuerpo, que es dado por vosotros. Haced esto en memoria de mi”. Lo mismo hizo con la copa. Despues que hubo cenado, les dijo: “Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre, que por vosotros se derrama”. “Sin embargo la mano del que me entrega esta conmigo sobre la mesa. “A la verdad el Hijo del Hombre se va, según esta determinado. Pero, !ay de aquel que lo entrega!” (Lucas 22: 16-22). El regreso de Cristo esta marcado por el numero 10, asimismo como diez son los mandamientos del pacto, 10 sera el numero maximo que Dios esperara antes de la destrucción final, por la violación del pacto hecho con el hombre, que fue sellado con la sangre de Jesucristo.

El fin esta cerca; la salvacion de todo aquel que haya creido y haya guardado el pacto, sera un hecho en muy poco tiempo. No desmaye, ni te desespere por lo que veas suceder en el mundo. Mantente firme y obtendra la victoria en Jesucristo. El regreso de Cristo sera visible.
El nos dice en su Palabra: “Cuando estas cosas empiecen a suceder, cobrad animo, y levantad vuestra cabeza, porque vuestra redencion esta cerca” (Lucas 21:28). “Os aseguro que no pasara esta generacion sin que todo esto suceda. “El cielo y la tierra pasaran, pero mis Palabras nunca pasaran”. Todo aquel que haya creido en Jesucristo, obedezca sus mandamientos y crea que Jesus fue resucitado de entre los muertos, no vera la muerte eterna, porque los muertos en Cristo resucitaran primero y los justos que aun esten vivo, seran transformados. Esta es una promesa maravillosa del Creador, y es un mensaje a la humanidad, a todo aquel que desee salvarse. No cuesta nada, la salvacion es gratis. Jesus pago con su sangre nuestra salvacion, no dejes que ese sacrificio haya sido en vano. No fuimos creados para vivir en este mundo eternamente; somos Peregrinos y Huespedes de Cristo, por eso tenemos que partir hacia nuestro hogar definitivo que esta en el Cielo. !ARREPIENTETE!……….CRISTO, esta esperando por ti para darte: SALVACION Y VIDA ETERNA.